cuando te incorporás en la cama con cara de circunstancia
puedo ver cómo tu mente bucea en un pasado de monaguillo que quizás no hayas
tenido nunca, esforzándote por encontrar argumentos creíbles , intentando hacer
nudos con una soga de humo. entonces tragás saliva y poniendo gesto de congreso
de física cuántica empezás a decir que esto está mal, muy mal, que nosotros estemos
así, acá y la ropa allá… y yo, yo sólo me voy en tus ojos, te dejo
hablar pero te pongo en mute, viajo al país en donde estuvimos hasta hace diez
minutos, te recreo en nuestro recreo y tengo que morderme para no sonreír. me concentro
en tus labios hasta que dejan de moverse y arqueás las cejas como pidiendo una
devolución de mi parte. sos lindo, -te digo, te beso y sigo- no quiero pelearte,
pero si hay algo en este mundo, en esta noche de la humanidad que está bien,
muy bien, es que nosotros estemos así, acá y la ropa allá.
bueno, muy bueno
ResponderEliminar