que ya ni el diablo
te salva.
Miguel Angel Pérez y Gustavo "Cuchi" Leguizamón.
Taganga
esta orilla colombiana
se parece a esa de Bolivia,
pero no lo es.
todo resulta tan bello y simple
como tener las patas llenas de arena,
como la cerveza porque sí,
como que tu erre errada
me provoca ganas de besarte,
y te beso.
fui tu mocha por unos días
y vos mi cable argento
enchufado a dos veinte.
relatar las chispas que nos sacamos
sería una obviedad.
algo de mi corazón se desprendió
en tu cuerpo,
mucho de tu corazón
exige unos versos.
lamento no estar
a la altura del conflicto.
¡carajo! cómo cuesta
soltarte un chau
en este contexto.
Tremendamente bello Mariana.
ResponderEliminarquién pudiera ser tu musa
ResponderEliminarahhhhhhh! me encanta el nuevo material.
ResponderEliminarte mando un abrazo inmenso desde el otro lado del río.
sol.
es hermoso, y siento envidia.
ResponderEliminarQue cosas maravillosas las que escribís.
ResponderEliminares asombroso que conjugues tres países en un mismo poema contando un amor en lunfardo y provinciano y el resultado sea algo tan lindo. te pasas.
ResponderEliminarEl lugar es precioso, pero el poema más todavía, debo confesar que a mí también me da un poco de envidia no ser tu musa.
ResponderEliminarY bueh, Marianita, tendrás que empezar a hacerte mediocre. No puede ser que todos tus poemas estén buenísimos...
ResponderEliminarBello, como lo simple, como la hermosa manera que tenes de jugar con las palabras y plasmar las emociones así, como sos vos. Beso enorme!
ResponderEliminarCuánta belleza junta, por Dios!
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