28.12.10

noche sin balcón.


no hay nada místico en el pronóstico,
no habrá tinto medio pelo ni pelo entero,
no hay nada que parezca estar vivo en este cuarto,
no hay ansiedad en mi cenicero.
no hay vértigo en la bombacha violeta
que no vas a arrancarme,
no habrá hormigueo en mi lóbulo izquierdo,
ni dobles intenciones en mis uñas pintadas de rojo.
ni siquiera existe la opción de invocar a la suerte,
no hay dedos que cruzar.
no seré hoy compañía en tu pulmón de grillo,
no seré mañana motivo de un ensayo en tu cabeza,
ni escena cinematográfica con pañuelo blanco
en estación de tren.

sólo hay esta noche sin balcón,
este poema sin nosotros.

27.12.10

culpa y cargos

llego a casa
y el sillón oficia
de respirador artificial.

las ojotas en el suelo,
las patas sucias,
la cartera revuelta
y Ernesto llamándome
desde el mismo libro,
pidiendo que me arrime
a su espejo.

las horas que pasaron fueron inmensas,
un delirio de empedrados
ensañados con mi corazón,
una reunión de esquinas-trampera,
el almanaque quemando sus naves
conmigo adentro.

los papeles dejan en evidencia
el balance de otro año
que huye como rata por tirante.

asumo todo mi desorden,
no encuentro manera
de argumentar mi defensa,
ya no soy inocente.

con culpa y cargos
enciendo un cigarro,
urge la biografía musical.

suena entonces Descartes,
ya ni sé en quién pienso.

Arturo juega con mi lapicera
y quiero vino.

21.12.10

nota.

escribí llorando sobre el telefonito:
moríte,
olvidáte de mí,
tiré tu regalo a la basura,
ya no te espero más.


firmé con m,
con m de mentirosa.

18.12.10

vejez.

a estas horas,
la vejez es una araña,
que teje mansamente,
la peor de mis pesadillas.

10.12.10

imposibilidad


ya no puedo andar por la ciudad,

nuestra historia está llena de esquinas.

6.12.10

pez


y si en el minuto pico
de mi hora pico de extrañarte:
te llamo,
no te asustes y perdona mi descuido.
a veces me olvido de tu no definitivo
y tengo tanta fe
que creo poder reconquistarte.
tranquilo,
sé ciertamente que mi nombre
está en tu olvido,
pero oír tu voz es un poco de agua,
un respiro,
para éste pez muriendo en tierra,
ya lejos de tu río.

31.10.10

un beso tuyo.

un beso tuyo. uno solo.
vení. sacáme del mundo.
aunque sea una noche.
cuanto te dije que quería
que no me resucitarás más
te mentí.
vení. resucitáme.
aunque sea sólo un segundo.
después la muerte valdrá la pena.




* Daniel Sartori le puso música y lo cantó alguna que otra vez en cierto bar que ya no existe.

21.9.10

abriendo juego

y un día,
en la función repetida de esa barra,
aparecieron tus ojos
como dos dados recién tirados.

así viniste,
como quien ignorando
la discordia de los terceros,
entra sin pedir permiso
y acierta el dardo.

así hubo tu mirada,
decretando el insomnio,
cantando envido.

8.9.10

currículum vitae


hoy me pidieron que entregue un currículum vitae para la empresa que ya está trabajando conmigo hace meses, una burocracía ridícula, como todas las burocracías. la cosa es que llegué a casa y descubrí que en mi computadora no había ningún archivo de currículim vitae, cuando compré mi computadora nueva pensé que esos tiempos horribles habían terminado, que sólo iba a guardar en ella poesía e intentos vanos de novelas, pero no. tuve que armar un currículm nuevo con datos poco precisos, tengo una capacidad increíble para borrar todo aquello que me jodió los días. hace un rato terminé, mañana deberé imprimir y llevar el currículum más falso de la historia para que forme parte de un archivo aburrido.
después me puse a pensar en las cosas que realmente deberían estar incluídas en una hoja de vida, me puse a pensar, ni más ni menos, que en las cosas me gustan de este mundo. levantarme a la mañana y preparar el mate en soledad, poner la canción que está sonando en mi cabeza y sentarme a matear en la mesada de la cocina mientras la escucho. todos los días me levanto con una canción en la cabeza, a veces pasan días y días y la canción es la misma, van cambiando según los estados de ánimo, pero lo primero que hago todos los días, antes de ir al baño y lavarme los dientes es poner, bien alto, la canción que amaneció en mi cabeza. me gustan las canciones, mucho, y me gustan distintos estilos de música, paso de la trova cubana al rock and roll parando en todas las escalas, aunque ayer y hoy sólo he escuchado la canción que me mostraste en un rincón de tu casa-cuarto, ese lunes tan lindo que parecía lluvia.
me gustan las calles con adoquines, muy especialmente las de San Telmo, y la lluvia decidida, sé que ya lo dije, pero es preciso dejarlo bien en claro, amo tanto la lluvia, mirar el cielo cuando amenaza con venirse abajo y sentir toda esa maravilla dando su función ante mi insignificancia.
me gusta el invierno, mucho, me encanta que haga frío.
me gustan las cosas cotidianas en las que casi nadie repara, el sonido del corcho cuando se destapa un vino tinto, mojar el pan en el tuco, quedarme en el agua hasta que se me arruguen los dedos de las manos, el segundo exacto en que llego a casa después de un día inmenso como el de hoy y me saco las zapatillas, el ronroneo de mi gato, el chocolate blanco y la menta.
mi día preferido de la semana es el jueves.
me gusta caminar por Buenos Aires mirando para arriba, hay otra ciudad allá, pero pocos lo saben. me gusta mirar el reloj parado de plaza Congreso, me gusta mirar los relojes parados en sí, imaginar qué día de cuál año se habrán detenido, me gusta pensar que un reloj parado no implica la muerte de nada sino más bien todo lo contrario, marcan el tiempo detenido en un momento justo, y es eso lo que vuelve al momento eterno. me gusta pensar que los relojes detenidos señalan citas importantísimas, besos que todavía son, que serán para siempre.
me gusta cuando suben músicos al subte para hacer “una que sepamos todos”, aunque me apena un poco que haya tanta gente gris que olvidó cómo era escuchar o aplaudir.
me gusta el tabaco en el cordón de la vereda, remojar los pies en la pileta las noches de verano, la marihuana en la terraza de casa mirando al cielo, el desorden de papeles, comprar libros usados, mirar por la ventana del colectivo e ir contando las patentes capicúa que encuentro en el camino.
me gusta mucho un tanque de agua que descubrí hoy en forma de O.V.N.I en una casa por Barracas, me gusta que exista gente que haga un tanque de agua con forma de O,V.N.I, quiere decir que el mundo no está tan loco como parece.
me gusta sacar fotos, y me gustan mis fotos, aunque yo no sea una profesional como vos. pienso que las fotos y los relojes detenidos funcionan de maneras muy parecidas.
me gustan estos días en que estoy tan optimista y ando por vez primera sin estrategia alguna, me gusta escribir esta especie de reivindicación de currículum vitae y dártelo a vos, porque los de la empresa no entenderían nada.
creo que todos los currículum vitae deberían tener estos datos. porque son éstas las cosas que se deberían tener en cuenta de las personas, después de todo … ¿a quién le importa a cuántos trabajos he renunciado o en cuántos idiomas sé decirte que sos lindo?

5.9.10

postal sin vos.


desde acá
la ciudad parece una postal,
y acaso lo sea.

gélidas autopistas,
la panorámica vista
del siglo después.

(malditos edificios,
cómo hacen para sostener
tanta hermosura.)

un cuento de ventanas
que no me pertenecen,
una canción que desconozco.

un campo de batalla
después de una guerra
en la que nadie ganó.

un silencio de iglesia sin fe,
miles de departamentos
en los que no hicimos el amor.






escrito en agosto de 2009.

fe de erratas, un año después: miles de departamentos (menos uno)

23.8.10

hache

hache de huracán, de humedad, de hecatombe.
hache de hombre, de hambre, de hechizo.
hache de hostil, de hielo, de herida.
hache de historia, de histeria, de hipo.
hache de hogaza, de hoja, de hierba.
hache de hervidero, de homogéneo, de heterodoxo,
hache de heraldo, de hilacha, de histrión,
hache de vos.